Marzo cerró con 21.357.646 afiliados medios tras sumar 161.491 cotizantes en el último mes (0,76%), un repunte que mejora el ritmo de creación de empleo propio de los terceros meses del año previos a la pandemia y eleva el total de oculados al mayor nivel desde julio de 2024 pero que se queda por debajo del repunte de los dos últimos años. El paro registrado, por su parte, sigue en mínimos de los últimos 17 años y acabó el mes con 2.580.138 desempleados, 13.311 menos que en febrero (-0,51%), afianzándose por debajo de la barrera de los 2,6 millones. Pese al impulso de la hostelería y del sector servicios, la comparativa interanual sale ‘a deber’ en tanto en afiliación como en desempleo por el ‘efecto Semana Santa’ que el año pasado (+193.585 ocupados, -33.405 parados) se dejó notar ya en las contrataciones en marzo por celebrarse ese mes el puente que este año cae en abril.
En el último año el total de ocupados ha aumentado en 455.679 (+2,2%) mientras que el recuento de parados se ha reducido en 146.865 personas (-5,39%), de los que casi 79.000 son mujeres, según los datos publicados este miércoles por los ministerios de Seguridad Social y Trabajo, respectivamente.
El total de afiliados medios cumple un año por encima de los 21 millones. El avance de marzo es inferior al anotado en el mismo mes de 2024 (+193.000 ocupados) y 2023 (+206.000 cotizantes), pero supera las subidas previas a la pandemia en dicho mes. Salvo en 2020, coincidiendo justo con el estallido del covid, desde 2011 la afiliación ha aumentado en todos los terceros meses del año.
El mayor incremento del número de cotizantes se registró en hostelería, que sumó 61.477 ocupados respecto al mes anterior (+4,4%). Por detrás, educación, con 14.369 más (+1,1%), y las actividades administrativas, que sumaron 12.986 ocupados (+0,9%).
Hay dos hitos en la afiliación de marzo: uno lo protagonizan las mujeres, que tras sumar 92.681 ocupadas (+0,9%) logran un nuevo récord histórico de 10.117.058 cotizantes, cifra que representa el 47,37% del total de afiliados a la Seguridad Social. El otro, la afiliación media de extranjeros, que subió en 46.807 cotizantes para superar los 2,9 millones de ocupados, nuevo máximo histórico.
De vuelta al desempleo, la menor cifra para un tercer mes del año desde 2008 llega de una caída con menor empaque que la de los meses de marzo de 2024 (-33.405 parados) y 2023 (-48.755), pero que supera el recorte de 2022, cuando el desempleo retrocedió en 2.921 personas. Desde Trabajo achacan el menor descenso de este mes con respecto al de 2024 en que las contrataciones por Semana Santa aún no se aprecian y en el mal tiempo que se vivió en la Península el pasado mes, un «lastre» más para la estadística.
Fueron los servicios, con 14.461 desempleados menos (-0,7%), donde más recorte del paro se anotó, seguido de la industria (-1.498 desempleados, -0,7%), la construcción, que restó 909 parados (-0,5%), y la agricultura, donde bajó 93 personas (-0,1%). Sólo aumentó el número de parados en el colectivo sin empleo anterior, con 3.650 desempleados más (+1,5%).
El descenso del paro, al igual que la afiliación, también benefició más a las mujeres. En concreto, el desempleo disminuyó en 9.176 mujeres en comparación con febrero (-0,6%), mientras que el masculino retrocedió en 4.135 desempleados (-0,4%). A cierre de mes, el total de paradas se situó en 1.553.778, su nivel más bajo en este mes desde 2008, mientras que se contabilizaron 1.026.360 desempleados.
Menor suerte hubo en el paro juvenil. Mientras el paro entre las personas de 25 y más años bajó en 15.949 personas (-0,66%), los desempleados menores de 25 años se incrementaron en 2.638 (+1,3%), aunque el número total logró anotar mínimos históricos para un mes de marzo, con 197.524 desempleados.
Mayor avance de los contratos temporales
Pese a la espera del grueso de contrataciones de refuerzo para Semana Santa, en marzo se registraron 1.166.601 contratos, un 3,8% más que en el mismo mes de 2024 (cuando se celebró el festivo), situación que se explica en la temporalidad. Del total de contratos en el mes, 508.662 fueron indefinidos (+0,7% interanual y el 43,60% del total) y 657.939 temporales (+6,3% y el 56,4% del total), según los datos de Trabajo.
La tasa de indefinidos es ligeramente inferior a la de un año atrás, cuando la proporción de contratos fijos fue del 44,9%. Dentro de los indefinidos, en marzo se realizaron 236.881 contratos a tiempo completo, un 6,4% más que igual mes del año anterior; 121.598 a tiempo parcial (+2,8%) y 144.183 fijos-discontinuos (-8,9%).
La medición que hace el ministerio de la Seguridad Social de los contratos indica que se contabilizan más de 3,8 millones de trabajadores más con contrato indefinido desde la última reforma laboral, con un incremento del 35,1% desde 2022. En concreto, cifran el total de ocupados con contrato indefinido cerca a los 14,9 millones, de los que más 9,86 millones trabajan a tiempo completo.
Según el Ministerio, el número de fijos-discontinuos se ha estabilizado y representa «tan sólo el 4,8% del total de afiliados» mientras el peso de los trabajadores temporales se mantiene por debajo del 12% (11,9%), frente al 29,5% del promedio anotado entre 2017 y 2021.
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